musicales originales

Estos días son maravillosos para explotar al máximo la creatividad. ¿Os habéis parado a pensar cuántos proyectos nacerán en estos días de encierro? Algunas cosas ya están saliendo a la luz: canciones, videoclips, artículos… Pero, ¿y todo lo que está empezando a nacer?

¿Cuántos musicales originales se crearán? Y, si es en nuestro país, ¿dónde se estrenarán? Gran pregunta de difícil respuesta.

Estoy convencidísima que en Madrid productores y teatros abrirán sus puertas a estas nuevas creaciones. Pero, ¿y en Barcelona? ¿Qué pasará aquí? ¿Seguiremos como hasta ahora? Espero que no.

En 2018, impulsada por Mariona Castillo y con el respaldo total de NunArt Guinardó, tuve el placer de organizar el ciclo de conciertos ORIGINALS, en el que seis compositores catalanes mostraron su obra -mayoritariamente inédita- ante el público.

Los conciertos se realizaron durante el primer semestre del año, los segundos domingos de cada mes, a mediodía, a la hora del vermut. Un horario extraño; en un espacio inusual para los amantes de musicales, pero que emanaba magia pura: la sede de NunArt Guinardó. El resultado fue espectacular.

Seis compositores -Alicia Serrat, Dani Campos, Andreu Gallen, Miquel Tejada, Ferran González y Marc Sambola- nos regalaron seis conciertos únicos e irrepetibles, llenos de talento, de amor, de buen gusto y de mucha clase. Y lo hicieron a cambio de prácticamente nada; pues el aforo de apenas 100 personas y el reducido precio de las entradas, no podía recompensar económicamente de ninguna manera el trabajo que les supuso realizar cada uno de esos conciertos.

Ese ciclo de conciertos, del que el canal Youtube de Teatremusical.cat cuenta con una fantástica lista de reproducción, demostró que en nuestra ciudad tenemos muchas ganas de crear musicales, y que hay muchos autores que lo hacen muy bien. Pero faltan medios para desarrollar estos trabajos.

Dagoll Dagom empezó apostando por los musicales originales en 1978

Dagoll Dagom empezó a apostar por el teatro musical de creación autóctona en 1978 con ANTAVIANA. Desde entonces, y van ya más de 42 años, no ha dejado de hacerlo. De hecho, es la compañía a la que más debemos los amantes del teatro musical en nuestro país. MAR I CEL marcó toda una generación e hizo nacer la pasión por el género a multitud de artistas ahora consagrados y a espectadores fieles. Pero hubo más: NIT DE SANT JOAN, GLUPS!, FLOR DE NIT, CACAO, POE, ALOMA, SCARAMOUCHE, MAREMAR… Todos ellos espectáculos escritos y concebidos por autores autóctonos. Con mayor o menor éxito de público, no lo negaremos, pero la apuesta ha sido siempre firme.

Pero, además de Dagoll Dagom; hay más profesionales que nos han regalado musicales originales: El Musical Més Petit estrenó CASTA DIVA y MOLT SOROLL X SHAKESPEARE; Manu Guix, QUÈ EL NOU MUSICAL!; La Barni, EL PROJECTE DELS BOJOS (con un nuevo proyecto ya entre manos)… También están EL TEMPS DE PLANCK de Sergi Berbel y Òscar Roig; KILLER, de Xavier Mestres y Guillem Clua; todos los espectáculos de Egos Teatre; GAUDÍ, de Albert Guinovart… por no mencionar la gran cantidad de musicales que se escriben para el público familiar, entre ellos el exitoso EL PETIT PRÍNCEP.

Nadie puede negarnos que somos una ciudad creativa y apasionada por el género, pero necesitamos más recursos.

Cinco propuestas para que las administraciones colaboren

Aprovecho estos días de confinamiento y reflexión para exponer algunas ideas, lanzarlas al aire, esperando que alguien las pueda recoger y aplicar o, si fuera posible, mejorar e implementar.

Aprovecho estos días para soñar con cosas como éstas:

  1. Sería maravilloso que el Institut de Cultura de Barcelona, dependiente de l’Ajuntament de Barcelona, implementara una plataforma de creación de musicales originales. Que becara anualmente unos cuantos proyectos para su desarrollo con el fin de estrenarlos, una vez finalizados, en un teatro. De hecho, el ICUB ya cuenta con esas Fábricas de Creación. Se trataría tan sólo de implementar un «programa especial» centrado únicamente en teatro musical.

    De esta manera, durante una temporada, la compañía o los creadores del espectáculo podrían desarrollar su proyecto «con tranquilidad», cobrando un sueldo por hacerlo.

    Este mismo «programa» podría también incluir encuentros entre creadores y público, talleres e incluso algún concierto.

  2. Sería de ensueño que el TNC volviera a implementar el Projecte T6 para jóvenes dramaturgos e incluyera algún musical. También sería fascinante que, tanto el TNC como el Teatre Lliure abriera sus puertas a la «gente del musical», permitiéndoles estrenar sus propios musicales originales o, incluso (tal y como hacen con el teatro de texto) estos teatros podrían producir musicales de autores foráneos sin suponer competencia para el teatro comercial.

  3. L’Auditori de Barcelona podría organizar un Ciclo de conciertos que estuviera protagonizado tanto por compositores, como por artistas del género (tal y como hizo la temporada pasada el Club Onyric del Teatre Condal). L’Auditori tiene salas de aforo reducido, como la Sala 3, que sería ideal para realizar este tipo de conciertos más íntimos.

  4. El Foyer del Liceo también sería un espacio ideal para realizar este tipo de conciertos, como quedó demostrado hace unos días cuando acogió la presentación del musical de Andreu Gallén y David Pintó DAUGHTERS OF BILITIS.

  5. La Generalitat podría otorgar subvenciones importantes a las compañías con proyectos interesantes para que pudieran estrenar sus espectáculos en un teatro comercial sin riesgo de pérdidas.


Creo que con estas cinco «pequeñas medidas» la realidad del teatro musical en Barcelona sería totalmente diferente. Ahora, está claro, que serían también necesarias campañas importantes de prensa y medios para que estos espectáculos y estas iniciativas llegaran al gran público, no tan sólo «a los de siempre». Los medios de comunicación deberían hacer eco de ello. Tanto televisiones, como radios y prensa escrita.

Y, como muestra, un botón, finalizo este artículo con el vídeo completo de la presentación que pudimos disfrutar en el Foyer del Liceo de Barcelona el pasado 6 de marzo del musical DAUGHTERS OF BILITIS compuesto por Andreu Gallén con letras de David Pintó y con Anna Moliner y Elena Gadel como protagonistas. No me diréis que no ES NECESARIO que este musical (y muchos otros que se están cociendo) se estrene en nuestra ciudad sin que nadie se tenga que embargar para ello… Esperemos que así sea.